La maquinaria es una parte esencial en cualquier instalación industrial, ya que de ella depende directamente su capacidad de producción. Por ello, es importante tenerla siempre en buenas condiciones de funcionamiento. Y para eso, es necesario un buen plan de mantenimiento industrial y saber cómo implementarlo.
Qué es un plan de mantenimiento industrial y para qué sirve
Un plan de mantenimiento industrial puede definirse como el conjunto de acciones a realizar para una correcta conservación de la maquinaria, equipos e instalaciones industriales. Gracias a esta técnica, los equipos estarán siempre en perfectas condiciones de uso aumentando la eficiencia, el rendimiento y la vida útil de los mismos.
Los procesos de producción industriales dependen en gran medida del buen uso de la maquinaria. Si los equipos están siempre en buenas condiciones de funcionamiento, la cadena de producción cumplirá con sus objetivos y no habrá retrasos. Además, protegerá al personal que las manipula, contribuyendo de esta manera, a evitar accidentes que puedan poner en riesgo la salud de los trabajadores.
¿Es necesario un plan de mantenimiento?
El concepto de un plan de mantenimiento industrial surge con la necesidad de mantener la capacidad productiva a través de un buen estado de funcionamiento de la maquinaria. Es fácil entender la gran competitividad que tienen las empresas hoy en día. La necesidad de vender sus productos a un precio de mercado, las obliga a mantener unos buenos niveles de producción y cualquier retraso originado influye directamente en su rendimiento.
Esto cobra especial importancia en aquellas industrias donde funcionan mediante cadenas de producción. Cualquier inconveniente en alguno de los tramos modifica el funcionamiento total del proceso. Fue en los años 30 cuando la empresa automovilística Ford introdujo un nuevo departamento destinado únicamente a la reparación de sus equipos de producción. A partir de entonces, se prestó especial importancia a este tipo de procesos y cada día se presta mayor inversión tecnológica.
En líneas generales, estas son las ventajas de tener un buen plan de mantenimiento industrial:
- Promueve la elaboración de los productos a bajo coste con alta calidad.
- Entrega puntual de los productos.
- Disminución de accidentes laborales.
- Mejor conservación de los equipos debido a su buen estado de funcionamiento.
- Contribuye a prevenir daños irreparables en los equipos.
- Ayuda a cumplir los objetivos.
- Aumenta la competitividad empresarial.
Cómo crear un plan de mantenimiento preventivo
Todo lo anteriormente dicho, nos lleva a entender qué es un plan de mantenimiento preventivo. Este consiste en el conjunto de acciones a realizar para que los equipos estén en buen estado de funcionamiento al objeto de que no haya averías que causan retrasos en el proceso productivo.
Una vez que se sabe para qué sirve un plan de mantenimiento preventivo, es necesario ponerlo en funcionamiento, y para ello, nada mejor que emplear el siguiente decálogo:
- Determinación de los objetivos.
- Realizar un presupuesto.
- Listado de maquinaria y equipos a incluir.
- Revisión del estado actual de los equipos.
- Consultar la información de los fabricantes para saber qué acciones son necesarias en cada equipo.
- Conocer las obligaciones legales.
- Designación de responsables.
- Escoger qué tipo de mantenimiento debe hacerse en función de cada equipo.
- Ejecutar el mantenimiento.
- Revisión de todo el proceso para analizarlo y evaluar si hay que realizar algún tipo de corrección.
Un buen plan de mantenimiento industrial tiene el objeto de mantener en buenas condiciones todos los equipos necesarios para realizar la producción. Y lo indicado es que sea realizado por profesionales en mantenimiento de industrias y edificios para que sea llevado a cabo. De esta manera, se garantizará la competitividad empresarial y la optimización de los procesos productivos.